LA CALDERA DEL ESPLIEGO

Al visitar la página Web de Tronchón de los últimos quince días de Febrero del 2007, hemos sido sorprendidos y nos ha traído recuerdos de nuestra infancia el observar la fotografía de la caldera utilizada para la destilación del espliego, y unos días después otra foto de este artilugio casi tapado por la vegetación de río Los Prados.

Cuántos recuerdos nos trae a los que aprovechando las vacaciones escolares, nos disponíamos a recoger este arbusto, que nos compensarían con una perricas, que tan bien nos irían para comprar chucherías los días de las fiestas.
A los tronchoneros más mayores, también les habrá producido una cierta nostalgia pensar en la época que se hizo esta recolección, dado que la campaña les servía para ayudarles a sufragar los gastos extras que tenían en su hogar los días de las Fiestas del Tremedal.

EL ESPLIEGO
Arbusto compacto, breñoso, perenne. Posee espigas de flores pequeñas, aromáticas, púrpura oscuro, coronadas por brácteas azul rosadas. La floración se produce a finales de primavera y verano. Las hojas maduras son aromáticas y de color gris plateado.

Muy abundante en nuestros campos.
Los días que duraba la siega del espliego, sobre todo al atardecer, se formaban un ir y venir de personas con su caballería cargada de fajos en dirección al río Los Prados, dejando en los caminos un perfume muy agradable producido al paso de la planta recién cortada.

Para la manipulación y destilación había empleadas dos personas, el señor Inocencio Magrazo y el señor Emilio Conesa. La campaña duraba un par de meses.
El resultado de la destilación, era una esencia de color amarillento, que se empleaba en perfumería y laboratorios medicinales.
No recuerdo exactamente el año que comenzó a recogerse el espliego, duró varios y terminó a mediados de los sesenta.

Nuestro amigo Hugo O. Gascón nos aporta unos datos que creo son interesantes y voy a transmitirlos.

“Espliego, viene del latín “spicula” diminutivo de “spica”. Y es el nombre vulgar de varias especies del género LAVANDULA. Su semilla se usa para los sahumerios. Crece silvestre, pero también me entero que se cultiva, y que su producido es económicamente muy redituable.

Alrededor de los años 40, en España, una plantación de una hectárea de espliego o lavanda, producía sólo 1,6 lts. de esencia, y el costo de lograr dicho producto era de 4,6 pesetas por litro. Habría que traspolar el valor de la peseta de aquel entonces a la actualidad para ver cuánto costaría ahora.

Se le pagaba al dueño del campo, dos pesetas por hectárea; 4,50 pesetas a los segadores; 0,36 pesetas por gastos de destilación; y 0,50 pesetas de gastos varios.

También observé en un dibujo cómo funcionaba la caldera en la que se hervía a presión el espliego y se lo destilaba en un alambique, para obtener la esencia, que luego se usaba en distintos menesteres.”

Antonio Conesa

Composición de la página Angel Gimeno Monforte 28-2-2007